Recorrido corto que combina tramos de pista forestal y zonas de senderos revirados, pasando por antiguas casas, algunas en ruinas y otras en restauración, y que nos llevará a conocer la Sierra del Aurò y el Torrent de Estiula.

Ideal para hacer en una tarde de verano o primavera; mejor evitar los fríos días de invierno y las tardes cortas.

Salimos de la Plaça de la Mainada de Campdevànol para tomar  el Camí Ral, que seguiremos el primer kilómetro, paralelos al Río Merdàs. Nos desviaremos, todavía por pista, hasta pasar junto a Mas Busacs. Siempre en constante subida, y atravesando algún hilado, llegaremos, ya por sendero, hasta el Collet de Daguí. En este punto iniciaremos un descenso hasta quedarnos encima del Gorg del Colomer, que bien se vale una parada. Seguimos rodando y al poco cruzamos el Torrent de Estiula. Cruzamos un prado y salimos a la pista de La Riba.

Encontraremos el desvío a Sant Feliu de Estiula, donde giraremos a la derecha y por pista llegaremos a la antigua ermita. En este punto haremos un divertido y precioso bucle hasta las Casas de Sant Feliu, punto más alto de la ruta. Éste, aun estando alejado de cualquier acceso cómodo, está en proceso de rehabilitación. Iniciaremos un corto descenso hasta casi retornar a la ermita. Poco antes giraremos a la izquierda atravesando una alambrada. Aquí empezaremos el sector más enredado y a la vez divertido, donde tendremos que estar bien pendientes del gps para no pasarnos los cruces. Vigilaremos con los hilados que nos vamos a encontrar en este tramo, ya que es zona ganadera.

Entre senderos llegaremos a La Cabana, otra masía en proceso de rehabilitación y lugar de pasto habitual de caballos. Pasaremos por los pastos sin molestar al ganado. Aunque seguiremos a tramos por sendero y a tramos por pista en claro descenso, hasta encontrar el cruce donde giraremos a la izquierda para remontar hasta Mas Cogulls. Un último tramo de divertida bajada trialera nos llevará hasta la pista de Estiula, donde giraremos a la izquierda para reencontrar el Camí Ral a la altura de la Ermita de Sant Llorenç de Campdevànol.

Por el Camí Ral regresaremos al punto de salida, la Plaça de la Mainada de Campdevànol.

AGUA: Todos los servicios en Campdevànol. Cruzaremos muchos torrentes durante la ruta, donde nos podremos remojar.

Recorrido corto pero exigente que sin alejarse del pueblo nos lleva por lugares de gran valor paisajístico. Combina una primera mitad de tramos de pista forestal con una segunda parte totalmente por senderos, pero prácticamente siempre ciclable.

Ideal para hacer en cualquier época del año, y para aquellos que se inician en la bicicleta de montaña.

Salimos de la Plaça de la Mainada de Campdevànol, pasando por delante de la iglesia y por calles llegaremos al Molinou. Cruzamos la carretera de Ribes y ya entramos en el bosque, con unos primeros metros llanos pero que empiezan a subir duro apenas hacemos un giro a la derecha.

Siempre por pista en constante subida, y respetando los hilados de ganado, llegaremos a la Collado de Clarella. Iniciaremos un rápido descenso que nos llevará a pasar por delante de Mas Clarella y poco después por el Gorg de l’Olla.

Dejamos atrás la poza y pocos metros después dejaremos la pista para tomar un sendero que sale a nuestra derecha. En este punto comienza la zona más divertida, siempre por sendero con consecutivos pequeños toboganes. Dependiendo de nuestra técnica nos tendremos que bajar de la bici alguna vez para salvar zonas de piedras.

Llegaremos al Coll de Comallevosa donde iniciaremos el último tramo de subida por sendero, que nos exigirá una buena técnica y piernas para superar los baches. Así llegaremos a Sant Roc, pequeña ermita con vistas a Ripoll y el Catllar. Aquí iniciaremos un rápido descenso, donde tendremos que vigilar con los hilados, y que nos devolverá al punto de partida para la barriada de Can Torrents.

Agua: todos los servicios en Campdevànol. En el Gorg de la Olla podremos refrescarnos.

Recorrido poco técnico que en su mayor parte transita por pistas forestales o caminos anchos de buen hacer. Prácticamente ciclable al 100%.

Se puede realizar durante todo el año, teniendo en cuenta que es bastante sombrío, y por tanto en invierno evitaremos las primeras horas del día y vigilaremos con las zonas heladas al cruzar los torrentes.

Casi en su totalidad la ruta pasa por explotaciones ganaderas, con lo que encontraremos frecuentemente hilados. Vigilaremos siempre dejarlos cerrados tras nuestro paso, para evitar problemas con el ganado.

Salimos de la Plaça de la Mainada de Campdevànol  para tomar el Camí Ral, siguiendo los primeros kilómetros paralelos al Río Merdàs. Pasaremos por delante del aparcamiento de la Font de Horta y seguiremos el Camí Ral hasta el cruce del camino que sube a Can Paraire.

Por pista de cemento pasaremos por delante de la casa, y en constante subida remontaremos la pista siempre junto al Torrent de Estiula, hasta que encontramos una curva a la izquierda donde rompe un camino de tierra. Aquí dejamos el cemento y remontamos un pequeño tramo de pista para en el siguiente cruce girar a la izquierda y entrar en un sendero. Este tramo es el más lento de la ruta, donde uniremos las masías de La Cabana y Can Colomer por senderos, en algunos casos tapados por los matorrales, por lo que nos centraremos especialmente en seguir el track. Dejamos Mas Colomer atrás y por pista llegamos al cruce de Sant Feliu de Estiula, que seguiremos hasta llegar a la ermita. La rodearemos y por camino ancho cómodo por el bosque llegaremos al Auró. Poco antes de llegar haremos un giro brusco a la derecha y tomaremos un camino herboso donde a ratos tendremos que seguir por intuición, ya que el camino se confunde con el prado y que nos llevará hasta el Pujol de les Llentíes, una masía en medio de la nada que respira tranquilidad a los 4 vientos.

La rodearemos para iniciar un rápido descenso que nos llevará a un corto tramo de cemento, y de ahí otra vez por pista en buen estado, hasta Sant  Esteve de la Riba. Este es un conjunto de masía y ermita que desde hace unos años se ha transformado en casa de turismo rural. Pasaremos por delante de la entrada del  e iniciaremos un sector de un par de kilómetros de cemento, hasta que encontramos un camino ancho a la izquierda que nos llevará hasta Vidalonja, otro conjunto de masía y ermita que en este caso todavía hace las funciones de masía.

Pasamos por el costado de la masía y detrás una alambrada encontramos el camino ancho, pero ya no en tan buen estado, que superando pequeños collados nos lleva hasta un depósito de agua. Cruzamos la puerta y pasamos junto al depósito para seguir en todo momento el camino bien fresado, que en cortas subidas y bajadas nos lleva hasta el Coll de la Bena, punto más elevado de la ruta. Una vez en el collado iniciamos un rápido descenso por pista en buen estado, pero estaremos atentos al GPS, ya que mientras bajamos tendremos que tomar un sendero a la izquierda que nos hará cruzar el torrente. Una vez cruzado seguiremos subiendo un rato, hasta empezar a bajar ya definitivamente, primero por camino ancho y donde encontraremos una fuente de agua fresca junto al camino. Después por pista en buen estado, bordeando el torrente de Vilardell, hasta Can Mir, una imponente masía muy cerca de Ripoll. Siempre por buen camino pasaremos por delante de la Ermita del Remei, el Coll del Remedio y llegaremos a Ripoll por La Torre, una zona urbanizada «fantasma».

Tocaremos el asfalto en bajada, para pasar por debajo de la N-152 y girar a la izquierda. Entre calles y siguiendo siempre el track pasaremos por delante de la comisaría de los Mossos y cruzaremos el Río Freser por un puente metálico. Ahora por la derecha del cauce del río, seguiremos avanzando hasta que cruzamos la N-152 con mucha precaución. Sólo tendremos que cruzar y subiremos por la Font del Sant para encontrar el Camí Ral y girar a la izquierda. Ya sólo nos quedará seguir este camino cómodo que nos dejará justo en la entrada de Campdevànol, donde regresaremos al punto de salida cruzando el puente sobre el Freser.

AGUA: Todos los servicios en Campdevànol. Cruzaremos muchos torrentes durante la ruta, donde nos podremos remojar. Fuente en el camino del Auró a Vilardell. En Ripoll encontraremos diferentes fuentes donde cargar agua y refrescarnos.

Este recorrido es una jornada larga por puestos desconocidos enlazado por carreteras locales. En los tramos de cemento vigilaremos los pasos canadienses. Son carreteras umbrías en su mayoría y convendrá vigilar la humedad que pueda haber en el suelo.

Es una ruta exigente, ideal para los amantes del ciclismo puro que quieren huir de las carreteras principales. La mejor época del año es a finales de primavera, verano o principios de otoño, teniendo en cuenta que podemos tener contrastes térmicos importantes. Es muy recomendable llevar un paraviento con membrana de agua.

Saldremos de Campdevànol por la nacional en dirección a Ribes de Freser, a donde llegaremos en suave pero constante subida. Justo en la entrada del pueblo, a la altura de la estación de tren, veremos el desvío a la izquierda que cogeremos para curzar, acto seguido, la via del cremallera i la del tren. Seguiremos subiendo, ahora con más pendiente. A los 2 km de subida encontraremos un cruce que seguiremos recto, dirección a El Baell.

En la entrada del núcleo encontraremos una fuente donde nos podremos avituallar o refrescar. Cruzaremos las pocas casa del pueblo y el asfalto se convertirá en cemento, siempre en bastante buen estado y alguna rampa fuerte. Al coronar una zona de prados la pendiente se suaviza hasta planear y siempre entre árboles y algún prado llegaremos a Campelles.

Esta vez no cruzaremos el pueblo, sino que ya en las primeras casas cogeremos un desvio, también cementado, a la izquierda.

Vigilaremos en algunas curvas porque pueden estar húmedas a cualquier hora del día y también con los pasos canadienses que encontraremos bajando. Esta pista nos llevará hasta Planoles, a la parte de abajo del pueblo, y enlazaremos en seguida con la carretera local que nos llevará hasta Nevà, con un primer tramo llano paralelo al río Rigard pero con un tramo final que pega fuerte.

Cuando veamos las casas delante nuestro, antes de la entrada al núcleo giraremos a la derecha y volveremos a coger otra vez el cemento, todavía unos kilómetros de subida, para acabar el tramo en el collado y bajar por asfalto en muy buen estado hasta casi Fornells de Muntanya.

Sin llegar a Fornells, en el cruce, giraremos a la derecha, para ir paralelos al rio Rigard hasta Planés, donde llegaremos tras una corta subida, i donde tomaremos la N-152 hasta Planoles, es suave y constante bajada.

Una vez pasado el albergue Lluís Artigues, a los pocos metros, veremos una pista cementada con un cartel que nos indicará «El Serrat». Mucho cuidado con la entrada a este tramo de cemento porque hay una canalización de desagües de la nacional i hay que entrar lentamente. Este camino nos llevará a Ventolà después de unas rampas de hasta el 17% en las que parece que el cemento se pega a las ruedas. Ventolà es un núcleo de cuatro casas agregado a Ribes de Freser. Cruzaremos las casas y bajaremos otra vez a la N-152 por carretera asfaltada haciendo unos zig zags muy divertidos.

Una vez en la nacional giraremos a la izquierda y en poco rato nos encontraremos en Rbes de Freser, capital de la Vall de Ribes, y donde podremos avituallar por completo.

Al salir de Ribes de Freser veremos a la izquierda la carretera local GIV-5263 que en 5 km nos llevará al encantador vecindario de Bruguera.

En las primeras casa el camino se bifurca, cogiendo nosotros la pista de la izquierda, donde encontraremos una fuente para refrescarnos y cargar agua, y que en constante subida nos llevará al Coll de Jou, punto más elevado de la ruta. Hasta el Coll toda la pista está cementada, en buen esta la mayor parte de los kilómetros y nos permite disfrutar de unas vistas privilegiadas del Pirineo Oriental y la Serra de Montgrony, viendo casi totalmente la ruta que hemos hecho hasta el momento.

Llegados a la cota 1600 empezaremos a bajar. lo haremos con precaución, ya que el suelo sigue siendo de cemento , la pendiente muy pronunciada, y en algunos tramos el suelo puede estar bastante deteriorado.

Con algún repechón entre medio, llegaremos a un cruce en el que seguiremos recto, otra vez en subida. A pocos kilómetros encontraremos de nuevo otro cruce que esta vez tomaremos a la derecha, subiendo hasta la Collada de la Caritat, y acto seguido, entre masías , llegaremos a la Collada de Burgarles, donde sabremos que hemos llegado al ver de cerca la antena que llevamos rato viendo. Desde el Coll, y siguiendo por pista cementada, descenderemos  hasta las masías Cavallera y la Colonia Estabanell.

Aquí enlazaremos con la C-28, carretera ámplia y bien asfaltada, que nos retornará a Campdevànol pasando por Sant Pau de Seguries, Sant Joan de les Abadesses i Ripoll.

AGUA: en Campdevànol encontraremos todos los servicios que necesitemos. Durante toda la ruta encontraremos diferentes torrentes donde refrescarnos. Tambien fuentes en El Baell, Campelles, Nevà, Ribes de Freser, Bruguera, Sant Joan de les Abadesses i algunas a pie de ruta entre los pueblos.

Recorrido corto donde disfrutaremos de unas carreteras tranquilas llenas de masías con cientos años de historia y la visión de Vallfogona de Ripollès, un pueblo con un casco histórico excepcional en las laderas de la Sierra de Milany.

Ideal para hacer una tarde de verano o primavera; mejor evitar los fríos días de invierno y las tardes cortas. Pasaremos por tramos muy sombríos en la carretera de Santigosa.

Salimos de la Plaça de la Mainada de Campdevànol buscando la nacional. Cruzamos el Río Freser y giramos a la derecha para bajar suavemente hasta Ripoll. Cruzaremos la capital comarcal y, después de detenerse si es necesario en un semáforo, tomaremos la carretera de Vallfogona. Siempre en suave subida nos alejaremos de Ripoll para adentrarnos en el valle salpicado de decenas de caseríos que siguen subsistiendo gracias a las antiguas explotaciones ganaderas.

Pasaremos el idílico núcleo de Vallfogona, y unos kilómetros después coronaremos el Coll de Canes, con 1120m, la cota más alta de la salida. Aquí iniciaremos un divertido descenso con constantes curvas que nos harán disfrutar al máximo apurando la frenada. Así llegaremos al Coll de Coubet, aún por encima de los 1000 m, donde giraremos a la izquierda y empezaremos un nuevo ascenso suave hasta el Coll de Santigosa, de 1064m. Rápidamente iniciamos los 7 Km de bajada técnica y divertida hasta Sant Joan de las Abadesses, donde después de cruzar el pueblo contemplando el puente medieval volveremos por la nacional, llana y recta, hasta Ripoll. Esta vez pasaremos por delante del Monasterio para realizar los últimos 3 Km en suave subida, terminando de nuevo en la Plaça de la Mainada.

AGUA: Todos los servicios en Campdevànol. Fuente a pie de carretera subiendo el Coll de Santigosa. También encontraremos agua a su paso por Sant Joan de las Abadesses.

Recorrido corto que nos llevará por parajes tranquilos que nos transportarán a épocas pasadas donde el campesinado mandaba.

Ideal para hacer en una tarde de verano o primavera; mejor evitar los fríos días de invierno y las tardes cortas. Pasaremos por tramos de cemento, hay que tener en cuenta que las bajadas de cemento pueden ser peligrosas, con alguna grieta en el pavimento. Estas pistas son usadas por tractores y ganado, a la vez que tienen el bosque a tocar; tendremos cuidado con estos ingredientes.

Salimos de la Plaça de la Mainada de Campdevànol para buscar la nacional. Subiremos por el eje pirenaico hasta Ribes de Freser, donde justo en la entrada giraremos a la izquierda para cruzar la vía de tren en dirección a El Baell. Comenzaremos a subir y sin descanso pero con rampas amables llegaremos al cruce que nos servirá para hacer el «bucle». Seguimos recto en dirección a El Baell, por una estrecha y divertida carretera. Una vez cruzamos el pueblo cambiaremos el asfalto por el cemento y realizaremos los kilómetros más «salvajes» donde es posible que algún animal nos cruce inesperadamente, así que cuidado.

Pasaremos por «Plaça de les Fonts» antes de llegar a Campelles, donde cruzaremos el pueblo por delante del Ayuntamiento. Al salir del pueblo iniciamos una rápida bajada que nos devolverá a Ribes de Freser casi sin darnos cuenta, y una vez cruzamos la vía férrea seguiremos bajando, ahora ya con más tránsito, por la nacional que nos devolverá al punto de salida.

AGUA: Encontramos agua muy cerca de la ruta en El Baell y Campelles. Si nos desviamos un poco del track también encontraremos en Ribes de Freser.

Recorrido que nos permitirá disfrutar de una jornada ciclista tranquila transitando unos parajes espectaculares todo alrededor íntegramente la Sierra de Montgrony, coronando uno de los pasos más elevados de este territorio.

Ideal para hacer un día de verano o primavera; mejor evitar los fríos días de invierno, ya que nos podremos encontrar con el Coll de la Creueta cerrado por la nieve y placas de hielo durante cualquier hora del día. Vigilaremos especialmente con los pasos canadienses que encontraremos entre el Castillo de Mataplana y Castellar de n’Hug.

Salimos de la Plaça de la Mainanda de Campdevànol para buscar la tranquila carretera de Gombrèn. La carretera siempre tiene tendencia a subir suavemente, más allá de alguna curva donde puntualmente se incrementa esta pendiente. Unos 2 Km después, justo tras cruzar el puente sobre la Riera de Garfull, encontraremos el cruce que tomaremos a la derecha. Apenas girar las rampas se hacen más duras, y seguirán así durante bastantes kilómetros.

Aunque está asfaltada, vigilaremos con algunos agujeros que encontraremos. Ganamos desnivel haciendo eses y las vistas van cogiendo amplitud con la Sierra de los Rasos de Tubau en el horizonte. Dejamos atrás el desvío al Santuario de Montgrony, que bien se vale una visita si queremos alargar un poco la salida. El acceso hasta el santuario es por carretera pavimentada en buen estado.

Poco después encontraremos una fuente a pie de carretera, y enseguida el Castillo de Mataplana, de titularidad privada. Atravesaremos un túnel excavado en la roca y iniciaremos un corto y revirado descenso, totalmente sombrío, donde encontraremos casi durante todo el año la carretera húmeda. De nuevo en subida, y con alguna que otra rampa fuerte, llegaremos al Barrio de Cal Ros, un grupo de casas junto a Castellar de n’Hug.

Con Castellar a la vista, giraremos a la derecha y llegaremos a la carretera BV-4031, que siempre en subida y serpenteando entre pastos, nos llevará hasta el Coll de la Creueta.

Coronamos el collado a 1888m, históricamente el paso natural entre el Berguedà y la Cerdanya, e iniciaremos un rápido descenso hasta la zona de los Alabaus de la estación invernal de La Molina. Cambiaremos de carretera para planear hasta la próxima Collada de Toses. Este collado, ha sido tradicionalmente el paso de la trashumancia entre el Ripollès y la Cerdanya.

En la Collada giramos a la derecha, e iniciamos un largo y muy entretenido descenso dominado en todo momento por la esbelta silueta del Taga, y que pasando por Planoles y cruzando Ribes de Freser nos llevará al punto de partida, después de unos últimos kilómetros donde la pendiente de bajada ya es muy suave.

Poco de llegar a Campdevànol, pasaremos por al lado del Puente de la Cabreta, una de las pocas estructuras que quedan en pie del antiguo Camí Ral entre Ripoll y Puigcerdà.

AGUA: Encontramos todos los servicios en Campdevànol. Fuente en Gombrèn, cerca del Castillo de Mataplana y bajando de la Collada de Toses. Además en la zona de los Alabaus hay un bar que normalmente está abierto, y en la misma Collada de Toses hay un hotel.

Recorrido divertido que transita mayoritariamente por carreteras muy poco transitadas y que nos permitirá disfrutar de una jornada ciclista tranquila disfrutando de unos parajes espectaculares alrededor la Sierra de los Rasos de Tubau.

Ideal para hacer un día de verano o primavera; mejor evitar los fríos días de invierno, ya que al circular por carreteras terciarias y boscosas fácilmente nos podremos encontrar con placas de hielo durante cualquier hora del día. Estas antiguas pistas forestales ahora cementadas son de tractores y ganado, y en alguna ocasión presentan barro. Vigilaremos especialmente con los pasos ganaderos; encontraremos 2 entre Sant Jaume de Frontanyà y La Pobla de Lillet.

Salimos de la Plaça de la Mainada de Campdevànol para buscar la nacional, en dirección Ripoll, que circunvala dirección Vic, y justo antes de entrar en la autovía giraremos a la derecha hacia Las Lloses. Esta ya es una carretera tranquila, con muy poco tráfico, que transcurre serpenteando junto a la Riera de Les Lloses. Poco a poco dejaremos atrás el diseminado núcleo de Les Lloses, Matamala y Palmerola, para coronar el Coll de Borredà y bajar rápidamente hasta el pueblo del mismo nombre. Sin entrar, giramos a la derecha en dirección a Sant Jaume de Frontanyà, donde llegaremos después de 9km de constante subida. Este núcleo rodeado de bosque ostenta el título de pueblo más pequeño de Cataluña, y si no tenemos prisas, bien se vale una parada.

Continuaremos a partir de este punto por una antigua pista asfaltada. En general el suelo está muy bien, sólo vigilaremos con dos pasos canadienses para ganado que encontraremos, un justo en el Coll de la Batallola, y el otro ya de bajada, para no poner las finas ruedas de la bici dentro de ellos.

Sólo salir de Sant Jaume ya encontraremos las primeras rampas duras, que a pesar de ser cortas, nos harán apretar los dientes hasta llegar al Coll de la Batallola. Una vez coronado, iniciaremos un divertido descenso que nos obligará a afinar los reflejos y la frenada en cada curva, siempre siguiendo el Torrent de Solís. Pasaremos por la zona de ocio de los Emprius, junto al Río Arija, y poco después, llegados al cruce giramos a la derecha, dirección Coll de Merola si nos queremos acercar a La Pobla de Lillet y en poco más de dos km encontraremos el pueblo o iremos a la izquierda.

La carretera B-402 serpentea con tendencia a subir, con alguna que otra curva donde la pendiente se incrementa claramente. Así llegaremos al Coll de Merola, donde encontraremos el refugio del mismo nombre, lugar de pernocta de muchos de los escaladores que aprovechan las vías abiertas de Montgrony. Ya enfilando el tramo final de la ruta, los primeros kilómetros de descenso son muy divertidos, con constantes giros y curvas a derecha e izquierda, que nos llevarán a cruzar Gombrèn, pueblo del Compte Arnau. Desde aquí, en 8 cómodos kilómetros llegaremos de nuevo al punto de salida, cerrando una ruta totalmente circular.

AGUA; encontramos todos los servicios en Campdevànol. En Borredà, Sant Jaume de Frontanyà o La Pobla de Lillet desviándonos ligeramente del track. Refugio Coll de Merola. Y en Gombren, ya en los últimos kilómetros.

El entorno natural del Torrent de Estiula es un espacio protegido de una belleza excepcional. Recordemos SIEMPRE no dejar ningún rastro de nuestra presencia. Todos somos responsables del cuidado de nuestro entorno.

Recorrido ideal para realizar durante una mañana o una tarde y aprovechar para desayunar o merendar disfrutando de las fantásticas vistas y las refrescante aguas del Torrent de Estiula. Muy cómodo de hacer, el desnivel lo sumamos en pequeñas subidas que hace el sendero, pero que pasan desapercibidas dada la belleza del lugar.

La Fuente de Querol es una zona de recreo con mesas y barbacoas, situada en un prado junto al Río Merdàs. A 2km de Campdevànol, parking de pago. Está prohibido estacionar el vehículo fuera de las zonas habilitadas para este uso.

Capacidad aparcamiento 100 vehículos / Precio / día 10 €

Iniciamos la ruta en el aparcamiento de la Font de Querol, donde habremos llegado en coche por la carretera de Gombrèn, o caminando por la Ruta Familiar Font de Querol.

Sólo atravesar el prado ya encontramos la fuente a nuestra izquierda, y en frente el sendero PR que seguiremos durante casi todo el recorrido. El sendero va salvando pequeños desniveles al cruzar los infinitos arroyos que arrojan sus aguas al torrente, pero sin más dificultad que vigilar con las raíces de los árboles. Rápidamente llegaremos a un primer prado con la masía en ruinas de La Mosquera. Seguiremos el PR y en breve llegaremos a la primera poza, el Gorg de la Tosca.

En casi todas las pozas encontraremos un letrero que nos indicará la dirección y tiempo en que se encuentra.

Continuaremos sin dejar el PR, superando pequeños montículos, y llegaremos al Gorg El Prat. Las cascadas van ganando espectacularidad y belleza a medida que avanzamos, por este orden, el Gorg de l’Olla, el Gorg de la Bassa del Pi y el Gorg del Forat.

Una vez dejamos atrás este último, y después de una corta bajada, cruzamos el torrente ayudándonos de unas piedras para evitar mojarnos los pies.

Planearemos hasta el Gorg Petit de Colomer, un lugar idílico donde refrescarse y comer algo, para seguidamente remontar la ladera de la montaña, siempre con unas magníficas vistas del torrente, hasta encontrar un cartel informativo que nos cuenta la formación de este barranco. Desde este cartel ya divisamos entre los árboles el último de los saltos de agua. Seguimos el camino fresado y de golpe bajamos hasta el torrente, donde visualizaremos una espectacular formación rocosa donde el agua se precipita al vacío para formar la más grande de todas las pozas, el Gorg de Colomer.

Después de una larga parada para disfrutar del lugar, dejaremos por unos instantes el PR y cruzaremos el torrente por el punto más estrecho, para remontar hasta un sendero bien marcado que seguiremos a la izquierda, en suave descenso. Al poco encontraremos un cruce con poste indicador. Seguiremos en bajada ya más pronunciada, y volveremos a pasar por el Gorg Pequeño de Colomer, esta vez por su derecha. Siguiendo el sendero fresado al poco reencontraremos el PR en el punto donde antes hemos cruzado el torrente.

A partir de aquí desharemos el camino que hemos realizado anteriormente, que nos devolverá al punto de partida, la zona de recreo de la Fuente de Querol.

Agua.- Encontramos agua y todos los servicios en Campdevànol. Fuente en la zona de recreo de la Font de Querol, al inicio de la ruta. Nos podremos refrescar el torrente, ya que toda la ruta transita paralela al torrente.

Recorrido ideal para hacer en verano con los niños. Llano y cómodo, siempre por camino sin ninguna complicación, el recorrido finaliza en la zona de recreo de la Fuente de Querol, un prado donde encontraremos mesas y barbacoas.

Salimos de Campdevànol, de la Plaça de la Mainada, en dirección al paso a nivel de la carretera Gombrèn. Cruzaremos el paso a nivel prestando mucha atención, tanto en la vía férrea como en la carretera. Nos colocaremos en la acera de la izquierda y en un centenar de metros encontraremos un panel informativo. En suave bajada por camino cementado llegaremos a un cruce de senderos, y pasaremos por entre dos bloques de piedra que sirven para que los vehículos a motor no accedan.

Aquí iniciamos el Camí Ral de Campdevànol en Gombrèn. Sin dejar este camino en ningún momento, pasaremos por el lado de la Font de Sant Eudald, donde podremos refrescarnos en verano si hace calor, y seguiremos siempre por el camino principal, cruzando algunas pistas de acceso a fincas privadas.

El camino siempre discurre entre el Río Merdàs y la carretera de Gombrèn, hasta que casi llegando a nuestro destino, cruzamos el río por una pasarela de cemento. Detrás ya encontraremos el aparcamiento de la Fuente de Querol y la zona de recreo. Al final del prado encontraremos la Fuente de Querol.

El regreso lo realizaremos por el mismo camino.

Agua.- Encontramos agua y todos los servicios en Campdevànol. Font de Sant Eudalt en el Camí Ral. Font de Querol en la zona de recreo.

Recorrido ideal para realizar durante una mañana o una tarde y aprovechar para desayuno o merienda disfrutando de las fantásticas vistas que tendremos desde Sant Grau. El tramo de subida a la ermita es empinado, el resto del recorrido es muy cómodo de realizar.

Salimos de Campdevànol, de la Plaça de la Mainada en dirección la Plaza del Ayuntamiento, y entre calles llegaremos a la carretera, que cruzaremos para pasar por delante de la zona deportiva. Una vez superamos las pistas de pádel cruzaremos una valla y empezaremos una ligera subida ya por sendero. Este sendero nos dejará en la pista del Molinou, que remontaremos (señales de GR) hasta encontrar un cruce, que tomaremos a la izquierda. Dejando a nuestra izquierda los pastos y el Mas de Molinou, y cruzando dos hilados, justo detrás del segundo enfilaremos nuevo por sendero (señales amarillas en los árboles) ya sin pérdida hasta la Ermita de Sant Grau.

La Ermita, que se muestra altiva sobre una colina, es un lugar de peregrinación para todos los Campdevanolencs. Una vez llegados disfrutaremos de las vistas que se dominan desde el pequeño prado que hay delante de ella.

Una vez descansados y recuperadas las fuerzas, descenderemos a la izquierda de la ermita por sendero, primero con fuerte pendiente y después suavizado, hasta llegar a «la taula» (la mesa). En este punto vamos a salir a una pista llana que seguiremos a la derecha, unos 500m, dejando la cantera a nuestra izquierda, hasta un giro donde encontraremos un hito en el suelo y una alambrada con portezuela. Con esta referencia encontraremos rápidamente el sendero que baja con fuerza pero sin ningún peligro, hasta un prado de pasto. Seguidamente cruzaremos el Torrent de Sant Martí y ya por pista llegaremos de nuevo al cruce de pistas que habíamos dejado antes. Siguiendo todo recto llegaremos a la carretera, que cruzaremos con precaución, para retornar al punto de partida ya por el paseo y las calles de Campdevànol.

Agua.- Encontramos agua y todos los servicios en Campdevànol. Fuente al cruzar el Torrent de Sant Martí, ya de vuelta.